julio 1, 2025
LICUADOS 3
Aún recuerdo los aromas del mercado, caminando por los pasillos buscando qué desayunar después de jugar una cascarita con los amigos.

Aún recuerdo los aromas del mercado, caminando por los pasillos buscando qué desayunar después de jugar una cascarita con los amigos.

La variedad era extensa, desde gorditas de chicharrón, tacos de todo, incluso barbacoa y consomé. Fruta por la mañana, suena bien, pero la verdad es que busca uno lo tradicional que es un huarache con costilla o unos tacos especiales, que aunque eran de pastor no sabian igual a los tradicionales.

Las quesadillas de hongos, queso y tinga. Las flautas rellenas de pollo, con su queso fresco y su crema en abundancia, con la salsa que le quieras poner, verde o roja.

Tacos de cecina, de tripa, de suadero, grandes, con tortilla normal de la que se usa para comer en tu casa, unos tacos grandes a buen precio. Con la salsa cruda verde.

Optamos por lo que en un inicio buscábamos: los huaraches de la muda que nos regaña cada vez que nos ve. Yo pido de huevo revuelto, mis compas piden de costilla, de longaniza.

Pero antes de llegar a los huaraches, vamos por nuestras bebidas, unos compran una soda (jarabe de sabor con agua gasificada), otos un tradicional licuado de plátano, fresa o chocomilk.

Al final después del huarache y el licuado, nos vamos por un vaso de fruta que compartimos entre dos. Esos vasos de fruta tenían algo peculiar: pedias la fruta que querias o la combinación y la depositaban en un balde, ahi la mezclaban con chamoy y chiles en polvo hechos por los fruteros, agregaban limón y listo una vez que todo quedaba impregnado de chile lo regresaban a su vaso y todavía le exprimían un limón o dos.

Ya de regreso a casa, comentábamos sobre el partido matutino de básquetboll y reíamos, burlándonos de alguno que se haya caído o que haya pasado por algún accidente.