septiembre 16, 2024
Esta deliciosa preparación es prueba de la grandeza de la gastronomía nacional}

Considerado como el segundo más rico de todo el mundo

El pan dulce mexicano es una prueba de la grandeza de nuestra gastronomía. Pan se hace en todo el mundo, pero ninguno como el que se cocina en el país. Una de las características más importantes del pan mexicano es su diversidad y sus curiosas formas: moños, rollitos, puerquitos, rejas y muchos otros más.

Taste Atlas, el portal culinario que reúne las opiniones de expertos gastronómicos de todo el mundo, señaló cuáles son los panes más ricos en México. Son dos. En primer lugar están los icónicos marranitos, y en segundo: las conchas, a las que les da 4.1 estrellas de 5 como calificación.

Así describe Taste Atlas a las conchas mexicanas: “La concha es un pan dulce tradicional mexicano con cobertura de azúcar blanca, rosada, amarilla o morena. El pan se elabora con harina, azúcar, levadura, sal, mantequilla, huevos y, a menudo, leche o vainilla. La cobertura blanca tradicional se elabora con una combinación de azúcar glas, harina y manteca vegetal”.

Y añade: “El nombre es una referencia a la parte superior del pan que se asemeja a una concha. Estos panes se pueden comer tal cual, bañados en chocolate caliente o leche, o cortados en rodajas y rellenos con frijoles refritos”.

México cuenta con una rica tradición panadera que refleja su diversidad cultural y geográfica. Entre los panes más famosos se encuentran los siguientes:

  • Pan de muerto: Este pan es una parte esencial de las celebraciones del Día de Muertos. Su forma redonda simboliza el ciclo de la vida y está adornado con tiras que representan huesos. Suele tener un aroma a azahar y una cubierta de azúcar.
  • Rosca de Reyes: Este pan se consume durante la festividad de Epifanía, el 6 de enero. De forma ovalada, está decorado con frutas cristalizadas y esconde pequeñas figuras de plásticos en su interior. Quien encuentra una figura debe organizar una fiesta el 2 de febrero, Día de la Candelaria.
  • Bolillo: Un pan salado que es base de muchas comidas, el bolillo es indispensable para acompañar platillos como chilaquiles o guisos. Su exterior crujiente y el interior suave lo hacen perfecto para hacer tortas, un tipo de sándwich mexicano.
  • Telera: Similar al bolillo pero más ancho y aplanado, la telera también se usa para preparar tortas. Su textura es un poco más suave que la del bolillo, y su forma facilita la inclusión de diferentes ingredientes.
  • Cemita: Originaria de Puebla, la cemita es un tipo de pan de sándwich con una cubierta de ajonjolí. Se utiliza para hacer la cemita poblana, típica de la región, que incluye ingredientes como milanesa, quesillo, aguacate y pápalo.
  • Mantecada: Una especie de magdalena, la mantecada es muy esponjosa y tiene un ligero sabor a mantequilla. Es común encontrarla en desayunos y meriendas.
  • Ojo de buey: Este pan dulce se caracteriza por su forma redonda y su centro relleno de mermelada o crema pastelera. Es un acompañamiento popular para el café.
  • Estos panes reflejan la riqueza de las tradiciones mexicanas y forman parte esencial de la gastronomía del país.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *