Esta receta golosa chocolateada surgió en una ocasión que utilicé San Valentín como excusa para darnos un nuevo capricho goloso en casa, que siempre suele ser preferiblemente chocolateado. Siempre es bonito compartir un dulce como estos pastelitos veganos de chocolate y naranja, mucho mejor si se comparte también la misma manta en el sofá en estos días de frío.
He adaptado un poco la receta original, que proviene de un libro de 1929. Entonces dudo mucho que interesara ofrecer alternativas más ligeras o veganas a los dulces de siempre, más bien debía verse como una receta de pastel económico y sencillo, ya que no contiene mantequilla, ni aceite, ni huevos. Yo he usado leche de soja pero podéis emplear cualquier bebida vegetal que tengáis en casa. Si sois muy golosos, aumentad la cantidad de azúcar hasta llegar a unos 200g.
Ingredientes
Para 8 unidades
- Harina de repostería170 g
- Avellana molida o almendra30 g
- Levadura química dos cucharaditas
- Azúcar vainillado5 g
- Sal una buena pizca
- Canela molida una cucharadita
- Cacao en polvo puro sin azúcar55 g
- Azúcar moreno50 g
- Azúcar110 g
- Naranja1
- Leche o bebida de soja250 ml
Cómo hacer pastelitos de chocolate y naranja veganos
Dificultad: Media
- Tiempo total35 m
- Elaboración15 m
- Cocción20 m
Precalentar el horno a 180ºC y engrasar 8 moldes individuales, de tipo magdalena, o preparar un molde grande de unos 20-22 cm de diámetro.
Disponer en un recipiente la harina de repostería, la avellana molida, la levadura química, el azúcar vainillado, la sal y la canela. Mezclar bien con unas varillas y tamizar encima el cacao puro en polvo. Rallar la piel de la naranja lavada y agregar los dos tipos de azúcar. Echar también la leche y mezclar lo justo hasta tener una masa húmeda sin grumos.
Repartir en los moldes y hornear durante unos 20 minutos, hasta que al pincharlos con un palillo salga limpio. Dejar enfriar sobre una rejilla y servir con azúcar glasé tamizado, o con una cobertura de chocolate, si apetece.
Con qué acompañar los pastelitos veganos
Me gusta servir estos pastelitos de chocolate y naranja veganos con fruta fresca, preferiblemente roja, ya que estamos con la excusa de San Valenteín. Por ejemplo, frambuesas, grosellas o fresas, y, si hay en la nevera, nata montada o un buen yogur. Con salsa de chocolate negro fundido, caliente, también están buenísimos.